jueves, 21 de marzo de 2013

Ternasco asado

El Ternasco es una de las carnes más identificadoras de la tierra donde yo vivo, Aragón. Con ese término se conoce al cordero joven perteneciente a alguna de las  razas autóctonas aragonesas (Rasa Aragonesa, Ojinegra de Teruel y Roya bilbilitana), alimentado desde su nacimiento con leche materna y cereales naturales y que se sacrifica con una edad inferior a 90 días y un peso en canal de 8 a 12,5 Kg.  

Es la mejor de entre las carnes de cordero.Se trata de una carne tierna y de sabor suave y homogéneo. Es sano no solo por ser fuente de proteínas, vitaminas y minerales sino por su bajo contenido en colesterol y grasas saturadas, lo que le hace tan cardiosaludable como el pollo. 

El Ternasco de Aragón fue la primera carne  fresca  que en España fue aceptada como Denominación Especifica. En 1996 fue reconocido  por la Unión Europea como Indicación Geografica Protegida (I.G.P).

El Consejo Regulador garantiza  que con los distintivos del Ternasco de Aragón, llegan al mercado sólo las canales de mejor calidad, controladas desde el origen, tanto la genética del animal como sus condiciones de cría y alimentación, hasta su sacrificio y manipulación hasta el punto de venta, donde puede identificarse por las siglas TA marcadas en rojo en todos los despieces.

Por lo que,  por  tener  vivir en la tierra de una carne tan excelente y porque en casa gusta mucho, a pesar del respeto que tengo a este tipo de guisos,  me atreví a preparar un asado de Ternasco por primera vez en mi vida. 

INGREDIENTES (Para 5-6 personas)
  • 2 Kg de Ternasco de Aragón
  • 3 cebollas
  • 2 dientes de ajo
  • Aceite de oliva
  • Sal
  • Pimienta negra
  • 1 vaso de agua
PREPARACIÓN

El día anterior, por la noche,  preparar el Ternasco. Salpimentarlo y colocarlo sobre una cama de cebolla en una fuente de horno. Guardar en la nevera.



Precalentar el horno a 180 º C, calor arriba y abajo.
Cubrir el Ternasco con otra capa de cebolla , añadir los ajos picados, un chorro de aceite y el vaso de agua. Tapar con papel de aluminio y meter al horno a 170 º C durante 2 horas.


Pasado ese tiempo, retiramos el papel de aluminio y damos la vuelta a la carne. Volvemos a tapar con el papel de aluminio y lo dejamos 1 hora. Si queréis añadirle  patata  o manzana (cortada a trozos, a mitades  o en rodajas gruesas) este es el momento.


A partir de ese momento, ya sin el papel de aluminio, lo dejamos aproximadamente otra hora más hasta que la carne este tierna y adquiera un bonito color dorado. Controlar que no se tueste excesivamente (podéis darle otra vuelta más a la carne si veis que adquiere demasiado color por ese lado).


Una vez listo, si no vais a servirlo inmediatamente podéis mantenerlo en el horno, eso si, de nuevo cubierto con el papel de aluminio, a unos 50º C hasta  que os toméis los aperitivos o el primer plato.


No hay comentarios:

Publicar un comentario